ellauri158.html on line 783: P. 3. prop. 12. Mens quantum potest, ea imaginari conatur, quae corporis agendi potentiam augent vel iuvant. [in: P. 3. prop. 13., prop. 15. coroll., prop. 19., prop. 25., prop. 28., prop. 33., prop. 42., prop. 52. schol., P. 4. prop. 60.]
ellauri158.html on line 785: -- P. 3. prop. 13. coroll. Hinc sequitur quod mens ea imaginari aversatur, quae ipsius et corporis potentiam minuunt vel coercent. [in: P. 3. prop. 15. coroll., prop. 38.]
ellauri158.html on line 866: P. 3. prop. 54. Mens ea tantum imaginari conatur, quae ipsius agendi potentiam ponunt. [in: P. 3. prop. 55., aff. defin. 25., aff. defin. 29.]
ellauri158.html on line 1185: P. 5. prop. 21. Mens nihil imaginari potest, neque rerum praeteritarum recordari, nisi durante corpore. [in: P. 5. prop. 29., prop. 31., prop. 34., prop. 38. schol., prop. 40. coroll.]
ellauri210.html on line 1323: En el caso de Prassinos se distinguen dos periodos, el de su adolescencia y el de una época más tardía. En su imaginario adolescente implica motivos típicos de los cuentos de hadas.
ellauri210.html on line 1346: Prassinos, heredera de los cuentos tradicionales de hadas contamina su imaginario con personajes desviados, transformándolos en “contes bizarres”. En un marco irreal, típico de los cuentos surrealistas juega con las metamorfosis: objetos que adquieren dimensión animal, humanos que se animalizan, animales que se transforman en humanos, o personas que se reapropian de otras, como muestran algunos de sus cuentos, como “la Psyché” donde la protagonista sufre por parte de otra mujer una apropiación de su voluntad, de su personalidad, llegando a ser su doble. Como en el estadio del espejo de Lacan, la protagonista reacciona al contemplar su imagen, no ante el espejo, sino ante la otra mujer: “Nous étions plus que jumelles et nous nous regardions subjuguées, chacune dans le miroir humain que lui tendait l’autre”.
ellauri210.html on line 1359: A pesar de todo, Gisèle Prassinos nos sumerge en un imaginario que nos recuerda a los cuentos clásicos con ciertas afinidades próximas a Nathalie Sarraute y a Baudelaire. Aunque los personajes sean dementes tenemos la impresión de estar ante seres inofensivos, llenos de ternura. La belleza en Prassinos nunca es explicita, se centra en destacar los debilidades que terminan por dar coherencia al relato.
ellauri210.html on line 1360: El monstruo es un ser complejo, no banal, que nos hace obtener resultados de nuestro yo profundo y oscuro, implica mutaciones pero también continuidades de sentido. Monsters have an interesting life, they don't work from 9 to 5. La subversion des images inattendues du corps féminin, sénile ou malade, se trouve particulièrment troublante chez Prassinos et Mansour. Como vemos, las dos autoras se sirven de un imaginario sórdido para expresar aquello que les duele.
xxx/ellauri229.html on line 304: Some imaginary friends are good for you, some aren’t. When your dead wife comes home after Madame Arcati’s farcical séance and begins to comment, you know exactly where you are. Coward wrote this play whilst at Portmeirion in Wales, a place perfectly fitted to imaginariness. Noel was such a coward that he had to flee the place.
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